Lo que ayer sería un desparpajo ofensivo
ante Dionisio y ante el célebre Baco,
me causa estupidez delirar con botellas...
y vasos
Ayer no más el wisky, y un ron enfurecido
entre vasos revueltos en desazón festiva;
despotricando a esta cabeza la memoria,
desgarrando con fragor gargantas leves
Cómplices de la traza tambaleante y borracha,
una jorga de mesas y una chusma de sillas.
Siii!!
Lo que ayer me bebí lo beberé otro día
y no me cuesta decir que es una porquería
el asco de morir suelto en el desperdicio
y el arte de vivir cual viles amargados
Cuando mis labios besan esa demencia loca,
pensaré que este mundo me aceptaría todo
y eructando la náusea de la blasfemia impía
soy dueño y soy señor del bar y de la hipertrofia
Y los tantos que pasan me miran indignados
cual si el demonio está... tentador en las calles,
y cual si la comezón de la lengua no calma
blasfemando doy giros en la plaza.